Buscador

A V I S O

Debido a los problemas que existen en los diferentes blog, y ha algunos que yo he tenido, desde ahora solo subire las reseña de los libros que voy consiguiendo y traduciendo, si alguno quiere algun libro puede pedirlo a mi correo, la verdad es una lata que me los borren y luego volver a subirlos, espero que esta nueva forma de obtenerlos no les represente un problema.


lunes, 4 de octubre de 2010

"LA SAGA DE DARREN SHAN"

4.- La Montaña de los Vampiros
The Vampire Rites Trilogy
Darren Shan

Me llamo Darren Shan. Soy un semi-vampiro. Era humano hasta hace unos ocho años, cuando mi destino se cruzó con el de Mr. Crepsley, y tuve que convertirme en su asistente a regañadientes. Me costó adaptarme al vampiro y sus costumbres (especialmente a beber sangre humana), pero al final lo hice, acepté mi situación y seguí con mi vida.
Formábamos parte de un espectáculo ambulante de asombrosos artistas de circo, liderados por un hombre llamado Hibernius Tall. Viajábamos por todo el mundo, presentando increíbles números para el público que apreciaba nuestros extraños y mágicos talentos.
Habían pasado seis años desde aquella vez que Mr. Crepsley y yo dejamos el Cirque Du Freak. Tuvimos que ir a detener a un vampanez loco llamado Murlough, que tenía aterrorizada a la ciudad natal del vampiro. Los vampanezes eran un grupo disidente de vampiros que mataban a los humanos cuando se alimentaban de ellos. Los vampiros no hacen eso. Nos limitamos a tomar sólo la sangre que necesitamos, y nos vamos sin hacer ningún daño a aquellos de los que bebemos. La mayor parte de los mitos sobre vampiros que leemos en los libros o vemos en películas en la actualidad, comenzaron con los vampanezes.
Aquellos seis años habían sido estupendos. Me convertí en un artista habitual del Cirque, actuando con Madam Octa (la araña venenosa de Mr. Crepsley) cada noche, asombrando y aterrorizando al público. Aprendí también unos cuantos trucos mágicos, que introduje en nuestro número. Me llevaba bien con todos los miembros del Cirque. Me acostumbré a aquel estilo de vida errante, y había sido una buena época.
Ahora, tras seis años de estabilidad, teníamos que emprender otro viaje hacia lo desconocido. Sabía algo acerca del Consejo y la Montaña de los Vampiros. Los vampiros estaban regidos por unos soldados llamados Generales Vampiros, que se aseguraban de que se cumplieran sus leyes. Ejecutaban a los vampiros locos o malvados y mantenían a raya al resto de los no muertos. Mr. Crepsley había sido un General Vampiro, pero renunció mucho tiempo atrás, por razones que nunca había revelado.
Una vez cada cierto tiempo (ahora sabía que era cada doce años), los Generales se reunían en una fortaleza secreta para discutir sobre lo que quiera que fuese que esas criaturas nocturnas bebedoras de sangre discutían cuando estaban juntas. No acudían solamente los Generales (había oído que los vampiros corrientes también podían ir), pero la mayoría lo eran. Yo no sabía dónde estaba esa fortaleza, ni cómo se iba hasta allí, ni por qué tenía que presentarme ante el Consejo... ¡pero lo iba a descubrir!


No hay comentarios:

Publicar un comentario